Hay que ver que el Gobierno Municipal de Madrid debe tener pocos problemas que resolver y mucho tiempo libre. Ahora van a prohibir tocar música en la calle, bajo sanción de hasta 750 euros por músico y con posibilidad de requisar sus instrumentos.
Es esto una muestra más de gobernar para los ciudadanos? Confundir manifestaciones artísticas en la calle con mendicidad, es no entender nada de la vida, ni del mundo ni de su ciudad. Habrá gente que interprete música con mayor o menor fortuna, pero estoy convencido de dos cosas: que alegran y adornan la alegría de mi ciudad y que preferirían ganarse la vida haciendo música de otra forma. En más de una ocasión músicos callejeros han adornado mi paseo por algún rincón de mi ciudad.
Es esto una muestra más de gobernar para los ciudadanos? Confundir manifestaciones artísticas en la calle con mendicidad, es no entender nada de la vida, ni del mundo ni de su ciudad. Habrá gente que interprete música con mayor o menor fortuna, pero estoy convencido de dos cosas: que alegran y adornan la alegría de mi ciudad y que preferirían ganarse la vida haciendo música de otra forma. En más de una ocasión músicos callejeros han adornado mi paseo por algún rincón de mi ciudad.
Si vamos a París o a Praga y escuchamos tocar el acordeón o el violín en sus rincones, vendremos fascinados. Pero claro, Madrid no es ni París ni Praga. Aquí tenemos a Gallardón.
Más nos valdría a los madrileños que se ocupase de lo importante, como los niveles escandalosos de contaminación que sufrimos los madrileños y que sólo hemos sabido hacer frente cambiando la ubicación de los medidores a zonas menos agresivas. Claro que el problema es ya tan grave que ni la trampa puede ocultar la magnitud de lo nocivo de nuestro aire.
Si queréis podéis leer la noticia en la revista Rolling Stone
Por cierto, señor Gallardón. Las calles de Madrid son de los madrileños, no de su Alcalde.
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